El Banco Central Europeo (BCE) se mantiene firme en su propósito de recuperar el tiempo y el terreno perdido respecto a otros grandes bancos centrales. No ha habido sorpresas en su reunión de octubre y no hay margen en la lucha contra la inflación, por eso la institución ha confirmado una nueva subida de tipos del 0,75%, de forma que el tipo de interés para sus operaciones de refinanciación se situará en el 2%, la tasa de depósito en el 1,50% y la de facilidad de préstamo, en el 2,25%. Dicho de otra forma, el precio del dinero se sitúa así en su nivel más elevado desde enero de 2009.

El anuncio no ha defraudado las expectativas de los mercados, que llevaban semanas adelantando el movimiento. Se trata del tercer aumento consecutivo, después del 0,5% de julio y del 0,75% de septiembre, y apuntala así la estrategia agresiva del Eurobanco presidido por Christine Lagarde para hacer frente a una inflación que en septiembre marcó el 9,9%.

«Con este tercer gran aumento consecutivo de la tasa oficial, el Consejo de Gobierno ha logrado avances sustanciales en la retirada de la política monetaria acomodaticia. El Consejo ha tomado la decisión de hoy y espera aumentar aún más las tasas de interés para garantizar el regreso oportuno de la inflación a su meta de inflación a mediano plazo del 2%. El Consejo de Gobierno basará la trayectoria futura de la tasa de política en la perspectiva de evolución de la inflación y la economía, siguiendo su enfoque de reunión por reunión», apunta el comunicado publicado por la entidad al término de su encuentro en Frácfort.

Fuente El Mundo